Editorial

En Zapotlanejo: la Irresponsabilidad de la 4T pasa Factura

El desbordamiento de la presa “La Tecata” a causa del incremento del caudal del río “La Peñita” son el reflejo de la irresponsabilidad con la cual el Gobierno de La Cuarta Transformación, al momento de invertir en termas de protección civil.

Por Salvador Mateo

vocero del Movimiento Antorchista en Jalisco

ZAPOTLANEJO, Jalisco. [ABC Medios]- Al momento de escribir estas líneas, la Unidad Municipal de Protección Civil y Bomberos de Zapotlanejo reportó que aumentó a un total de 227 inmuebles afectados, 169 viviendas y 58 negocios, por la inundación registrada la madrugada del pasado miércoles 14 de agosto, a causa del desbordamiento del río La Peñita y de la presa La Tecata, y que además cobró la vida de un joven de 21 años.

Fueron horas de horror e incertidumbre las que se vivieron en este municipio ubicado en las cercanías del Área Metropolitana de Guadalajara. A través de medios de comunicación y redes sociales circuló la información de que desde las 02:00 hasta las 05:00 horas, cientos de personas perdieron prácticamente todo su patrimonio: muebles, vehículos y hogares. Entre el lodazal las personas hundieron sus zapatos, tenis, chanclas y con los pies descalzos sacaron toda el agua que aún quedaba en sus viviendas.

Pero algo que se está volviendo normal en nuestro país, sobre todo en estos últimos años, es el hecho de que tras cualquier fenómeno natural con cierta capacidad destructiva, junto al despliegue de soldados, de bomberos y funcionarios de las distintas dependencias relacionadas con el caso que acuden en ayuda de los necesitados, no falta la inundación de demagogia de políticos, la lluvia de promesas de ayuda para las familias damnificadas que perdieron todo, de reparación inmediata de daños que nunca se cumplen o cuando más se cumplen a medias.

Lo más indignante es que algunas autoridades afines a MORENA, con el claro propósito de justificar su ineptitud para atender la emergencia, le echaron la culpa de la desgracia al cambio climático, cuando en realidad todo apunta a que la causa fue la nula inversión pública a la infraestructura de la misma.

Veamos. Especialistas en recursos hídricos, en un recorrido por la zona del desastre, encontraron que la presa La Tecata tiene estructuras de 50 años de antigüedad, sin mantenimiento y sin compuertas para dejar correr el afluente.

Josué Sánchez Tapetillo, especialista en hidrología, afirma que, aunque la presa colapsada esté en una propiedad privada, no es justificación para que el gobierno federal y municipal no hayan realizado los trabajos de rehabilitación correspondientes.

La Federación abandonó la presa y ahora una parte del pueblo jalisciense está sufriendo las consecuencias de su negligencia. A estas alturas, la mayoría de los mexicanos sabemos que las presas y los cauces de ríos y arroyos son regulados por el gobierno federal, a través de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), y esta dependencia, que incluso cuenta con una estación meteorológica en la cabecera municipal de Zapotlanejo, es la que tuvo que haber estado al pendiente del nivel de la presa, así como del seguimiento de la obra.

Asimismo, no se puede olvidar, en ninguna circunstancia, que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, no conforme con haber eliminado en 2020 los recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden), en 2023 decidió que los estados y municipios enfrenten con recursos propios los daños por fenómenos meteorológicos, decisión que fue calificada por algunos actores políticos como una irresponsabilidad.

No hay lugar a dudas; es la irresponsabilidad de la 4T ante desastres naturales la que acaba de cobrar factura en Zapotlanejo y no el cambio climático. Frente a este lamentable panorama, el pueblo de Jalisco y del país debe unir fuerzas y, como un solo hombre, exigir al gobierno federal la ejecución de obras hidráulicas con capacidad de evitar inundaciones por colapso de presas y por desbordamientos de cauces de ríos y arroyos, como recomiendan los expertos. No hay que esperar otra tragedia para actuar.

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